Desde su primer largometraje 'Who´s that knocking at my door?' (1967) Martin Scorsese ha reflejado esa vida de la mafia que tan cerca ha tenido durante su infancia. En el libro 'Martin Scorsese: Una retrospectiva', habla de las peleas que tenía su padre, de los chanchullos de su tío Joey o de cómo el cine desvió su camino como sacerdote.
Todos estos aspectos de su vida se verían en su primer largometraje, luego vendrían 'Mean Street' (1973), 'Goodfellas' (1985), 'Casino' (1995) y ahora para poner broche y final a toda esta "saga" de mafiosos que Martin Scorsese nos ha deleitado durante su enorme trayectoria, llega: The Irishman.
Una película que narra la vida de Frank Sheeran, veterano de la segunda Guerra Mundial, estafador y asesino a sueldo con el contexto político del ascenso de la familia Kennedy y la participación del legendario sindicalista Jimmy Hoffa.
Una película que narra la vida de Frank Sheeran, veterano de la segunda Guerra Mundial, estafador y asesino a sueldo con el contexto político del ascenso de la familia Kennedy y la participación del legendario sindicalista Jimmy Hoffa.
Inspirada en el libro 'I heard you paint houses' de Charles Brand y con la ayuda de Netflix para su producción, Martin Scorsese ha conseguido realizar la película que quería, y eso se nota. Muchos pensaran como dijo @jlamotta23 en Twitter: "Ver esta película en Netflix es como ver la Gioconda en un garaje" . Pero lo cierto es que da igual dónde, cuándo o cómo la veas, eso sí, es una películas de obligado visionado, de esas que con el paso del tiempo tienden a mantenerse en el exclusivo listón de clásicos del cine. Por sus interpretaciones, por lo que implica ese cambio de rol que están adquiriendo las plataformas de streaming o porque funciona de maravilla como homenaje a toda una trayectoria en la que Martin Scorsese ha vivido junto a amigos y compañeros, Robert de Niro, Joe Pecsi y Harvey Keitel.
La película transcurre a lo largo de 40 años durante los que veremos a los personajes envejecer y para que esto se lleve a cabo de la forma más veraz posible se ha tenido que utilizar técnicas digitales de rejuvenecimiento de los actores. Realmente no es algo que en la película desconcierte o moleste, al menos no a la larga, pero si que es verdad que mientras que en otros personajes se nota bruscamente el cambio del paso del tiempo, dado al cambio de actores o actrices (como se puede ver con el personaje de Peggy), en determinados personajes troncales apenas cambian físicamente.
En 'El irlandés', el gran peso de la película recae en las interpretaciones actorales. Donde vamos a ver a un Al Pacino que trabaja por primera vez con Scorsese, pero que brilla en cada una de sus escenas, un Robert de Niro contenido, que no necesita llorar para expresar sus sentimiento y un Joe Pecsi que llevaba 20 años retirado y que Scorsese consiguió por insistencia que aceptara el papel.
Todos juntos hacen mantener esas 3 horas y media en lo más alto, sin que pierdas la atención ni un solo momento y para ello no necesitan de grandes dosis de acción, les bastará con su talante, la conexión entre ellos y la magistral elaboración del guión. Con un ritmo pausado y lleno de largos diálogos, la manera que tiene Scorsese de contarnos la historia, que por momentos es compleja, es de ser un completo maestro del cine. La utilización de elementos extradiegeticos para dar información extra de algunos personajes, la puesta en escena, el aire elegante y sofisticado que se mantiene a lo largo de toda la película pero sin dejar de lado el tono humorístico... Todo esto le ayudará a mantener la atención del espectador e implicarle en la reflexión de como una persona que lo ha tenido todo, el éxito, la familia, el dinero, al final se queda sin absolutamente nada, solo.
Esta sensación de melancolía que cubre la última parte también dejará esa impresión de última película sobre gangster de Martin Scorsese. Dando la sensación de aglutinar 'Mean Street' (1973) 'Goodfellas' (1985) y 'Casino' (1995) en una sola película.
La manera de narrar de Scorsese en 'El irlandés' es con un talante serio donde todos recursos que lleva a cabo: Voz en off, cámara lenta, travelling etc. Son utilizados para contar algo valioso no por el simple hecho de que estéticamente es bonito. Utiliza ese lenguaje para contar emociones, para contar los problemas que tienen los personajes o sus perturbaciones.
Martin Scorsese a diferencia de sus primeras películas no trata de experimentar, aquí encontramos que cada movimiento de cámara, congelación de fotogramas o zoom están extremadamente justificados para que la historia sea entendida de manera más sencilla y acentuar la realidad de los hechos. El mejor ejemplo de esto, son los asesinatos en los que no se va a recrear con largos tiroteos y chorros de sangre, ¡Pum! Y se acabó.
Lo mejor: Poder ver a esos tres titanes de la interpretación juntos y que sigan están en su más alto nivel. Joe Pecsi, Robert de Niro y Al Pacino ¡Brillantes!
Lo peor: ¿Será la última película sobre mafia de Martin Scorsese?
Valoración: 9 sobre 10
Tráiler:
Cristian Fuster
No hay comentarios:
Publicar un comentario