El director español Juan Antonio Bayona ha sido en el encargado de dirigir la segunda parte de las nuevas películas de Jurassic World. El film tiene como fecha de estreno en España el 22 de junio de 2018 y son muchos los que lo esperan como agua de mayo.
De nuevo, con uno de los actores de moda, Chris Pratt,y Bryce Dallas Howard como protagonistas, la secuela no centrará su historia en un parque
temático en el que los dinosaurios se rebelan, sino que irá más allá
potenciando la idea que aparecía en 'Jurassic World' según la cual los
velocirraptores serían utilizados para fines militares.
El guionista quiere jugar con la posibilidad de que la creación de
dinosaurios fuese libre y que distintas empresas pudiesen crear nuevas
especies de dinosaurios.
Con esta premisa Bayona debuta en Hollywood con una superproducción, de la cual está muy orgulloso no solo por poder dirigirla, sino también por estar junto a Spielberg, el cual aparece como productor ejecutivo.
Mentiría si dijese que no temía el traspaso de 'Black Mirror'de Channel 4 al monopolio que está construyendo Netflix. Sentí el pavor de que se desplomase una serie de mediometrajes convertida ya en hito de la televisión (por su calidad, más allá de la popularidad o los números que muchas otras consiguen). Capaz de retratar de una manera terrorífica a la vez que creíble la aplicación de las nuevas tecnologías a la condición humana. Por eso he tardado tanto en ver el primer capítulo de esta segunda etapa de la serie; sin embargo, las críticas favorables me convencieron para que comenzara la aventura.
El universo 'Black Mirror' de historias independientes, en la que cada capítulo era una galaxia entera, tenía en común la brillantez con la que se reflejaba en esa mezcla de ciencia ficción e hiperrealismo, como si de un espejo que muestra cosas feas pero verídicas se tratase (no el espejo roto de la introducción que distorsiona la realidad), varios temas universales: el afán de adaptación y aceptación en el medio, que muchas veces conduce a las personas a cometer actos estúpidos y malvados como en '15 millones de créditos' o la terrorífica 'El oso blanco', que también trata la venganza y la ira; los celos y la ambición de 'Tu historia completa' o las persecuciones injustas por motivos políticos, económicos o ¿artísticos? en 'El momento Waldo' y la primerísima 'El himno nacional'. Parece que los nuevos capítulos van a seguir teniendo esto en común. Charlie Brooker, el creador de la serie, director y guionista de buena parte de los capítulos,se ha convertido en el Shakespeare del futuro aplicado al cine.
'Caída en picado' ('Nosedive' en el original) es una parábola sobre la excesiva importancia que se le da a la opinión pública, la adicción a las redes sociales y el clasismo que se deriva de ambas. Lacie (Bryce Dallas Howard) es una joven oficinista que vive con su hermano, pero se les acaba el alquiler y la joven se ha fijado en un apartamento de una elitista urbanización, para conseguirlo tendrá que mejorar su imagen pública, que se mide con una nota de 1 a 5 estrellas y que aumenta o disminuye a partir de las notas que te dan las personas con las que te cruzas día a día.
En su odisea por naufrgar en Ítaca, osea, un paraíso artificial de falsas apariencias, de sonrisas forzadas y vivencias vacías, Lacie experimentará una profunda catarsis en la que se tendrá que dar cuenta de lo estúpido de sus acciones para ascender en la escala social: jugar con sus propios sentimientos al tratar de restablecer una amistad marchita con una mujer que la empleaba como sombra, perder los nervios, dejar de ser ella misma, convertirse en algo grotesco y caricaturesco...
Ella deja de ser ella, él deja de ser él y todos pasan, una vez más en 'Black mirror', a ser corderitos de un rebaño de Dollies. Y aquel que no esté obsesionado por subir constantemente fotos a la nube, por obtener notas altas de la gente importante, por ser un arribista, pasa a ser poco menos que un sociópata. Esto se ve en el personaje de la vieja camionera, o en menor medida en el hermano de Lacie (James Norton). El hombre ajeno a lo material, poco interesado en agradar a cualquiera, el 'radical libre' (que diría Manuel Vicent), aquel que “adonde quiera que vaya, nunca tiene cobertura y por tanto permanece incontaminado, a salvo de cualquier basura mediática.” Ese se convierte en el raro, en el marginado. Y nosotros también dejamos de ser nosotros. A pesar de que esta hipérbole nos repugna, también nos asusta porque no es difícil imaginarse que nos dirigimos hacia un mundo así, donde la mayoría son esclavos de una sociedad juiciosa y cruel. Y es que, hay quien más, hay quien menos, las redes sociales han empujado a que los jóvenes (y no tan jóvenes) se sientan obsesionados por los likes, retweets y demás memeces. Del '¿qué dirán?' de las aldeas, hemos pasado al '¿les gustaré?', la sociedad absorbe al individuo, lo destrona y despoja de su cetro de sensatez. La culpa es de todos.
Esta vez Charlie Brooker codirige la película junto a Joe Bright ('Orgullo y prejuicio [2005], 'Expiación, más allá de la pasión' [2007]) que consigue transformar esa estética romántica de las novelas de Jane Austen, idílica, ordenada, geométrica con colores pastel empalagosos que impregnan toda la pantalla, en una sensación de intranquilidad, de zozobra por el exceso de plástico, de mentira y vacío que transmite el argumento. Esencial es también el trabajo del gran director de fotografía Seamus McGarvey que aporta esos filtros de Instagram tan acordes con la hipocresía y el retoque moral que muestra el guion.
¿Hacia dónde vamos? ¿Hacia trabajos improductivos y estúpidos? ¿Hacia un clasismo exacerbado? ¿Hacia el culto ciego por la imagen? ¿Hacia la vida sin vida envuelta en rosa pálido, amarillo canario, azul pitufo y maquillaje anaranjado? ¿Hacia la desconoxión con la naturaleza y con uno mismo? ¿Hacia el adiós de la diversión más pueril y pura? No sé. Charlie Brooker y su equipo nos alumbraran en el siguiente capítulo de 'Black Mirror'.
Lo mejor: La ambientación y la fotografía, que dotan a la historia de una atmósfera de inquietud. Lo peor: El desarrollo superficial del personaje de la camionera, que prometía ser el contrapunto de la historia.
Valoración: 8/10
Tráiler
Sinopsis Lacie (Bryce Dallas Howard) trabaja en una oficina y vive en un mundo lleno de felicidad, sonrisas y obsesión por la imagen pública. Su amiga Naomi (Alicia Eve) está muy bien posicionada en la élite social, y Lacie está desesperada por unirse a ella.
Después de que Disney nos sorprendiera con una nueva adaptación de 'El libro de la selva', la fábrica de sueños nos trae 'Peter y el dragon',un remake de 'Pedro y el dragón Eliott'. Esta producción permitirá que los más nostálgicos se reencuentren con algunos de los personajes de su infancia después de 39 años. La nueva recreación de Walt Disney cuenta con la interpretación de Robert Redford, Bryce Dallas Howard, Karl Urban y Wes Bentley.
El cartel nos recuerda en cierto modo al de la película de Spike Jonze, 'Donde viven los monstruos', pero en este caso la obra esta dirigida por David Lowery.
'Peter y el dragón' narra la historia de Grace, una joven que trabaja como guarda forestal y que no cree ninguno de los fantásticos cuentos de su padre sobre un feroz dragón, pero todo cambiará cuando conoce a un misterioso niño de 10 años que no tiene familia ni hogar y que asegura vivir en el bosque con un enorme dragón verde llamado Eliott.
'Peter y el dragón' se estrenará en los cines de EE.UU el 12 de agosto y unas semanas más tarde podremos verla en España.
Steven Spielberg regresa como productor ejecutivo de Jurassic World, la nueva y anhelada entrega de Parque Jurásico. Colin Trevorrow se encarga de dirigir la épica aventura de acción a partir de un guión que coescribió con Derek Connolly.
Universal Spain nos muestra las entrevistas realizadas a los dos protagonistas de la película, Chris Pratt y Bryce Dallas Howard. Un largometraje que ocurre veintidós años después de los acontacimientos de Parque Jurásico, Isla Nublar tiene ahora un parque temático de dinosaurios en pleno funcionamiento llamado Jurassic World, como lo había previsto John Hammond. Después de 10 años de funcionamiento, las tasas de visitantes están en declive, y con el fin de cumplir con el mandato corporativo, crean una nueva atracción para rescatar el interés de los visitantes, lo que da como resultado algo horrible. Sin más dilación os dejamos con las dos entrevistas.
Jurassic World la película que esta batiendo records tanto en España como en el resto del mundo. Esta película dirigida por Colin Trevorrow transcurre exactamente 22 años después de los acontecimientos ocurridos en Isla Nublar. Jurassic World es el primer parque temático del mundo que combina realmente las maravillas de la ciencia y de la historia con la comodidad y el lujo al que están acostumbrados los viajeros internacionales. Cuando todo parece ir a la perfección y ser el negocio del siglo, un nuevo dinosaurio de especie todavía desconocida y que es mucho más inteligente de lo que se pensaba, comienza a causar estragos entre los visitantes del parque.
A FAVOR
Estamos viendo que en Hollywood se queda sin ideas, ya que esta de moda relanzar sagas clásicas, como Mad Max, Terminator y como no Jurassic Park. Desde el comienzo podemos apreciar muchos guiños a las primeras películas de la saga, esas puertas míticas que nos dan la entrada al parque, la manera de alimentar a los dinosaurios o incluso algunas escenas tomadas desde los mismos ángulos, nos crea una gran nostalgia a la trilogía. Aunque realmente nos hemos quedado con las ganas de ver algún cameo de uno de sus anteriores protagonistas.
Colin Trevorrow se enfrenta a su mayor desafío, se encargará de reavivar la saga después de que decayera con "Jurassic Park III", siempre es complicado alcanzar el nivel de las primeras películas y esta se nos presenta en primera instancia a unos protagonistas un tanto estereotipados y un parque que no llega a sorprender, debido a la gran cantidad de tráilers y promociones en los cuales nos revelan bastantes datos e imágenes. Pero después comienzan las escenas de acción y los efectos especiales que es el punto fuerte del largometraje.
Las actuaciones de los personajes principales tanto de Chris Pratt y Bryce Dallas Howard son bastante solidas y encajan muy bien. Nuestro "Guardián de la Galaxia" vuelve a ser el que lleva el peso cómico y es el personaje más carismático de todos. La pena es que los personajes secundarios resultan muy planos y en ningún momento nos podrán llegar sorprender. También el romance de los protagonistas a pesar de la química entre ellos es poco creíble.
La peor trama de todas es la de los niños, se supone que es la historia en la que sientes compasión y pena, pero en ningún momento te sientes identificado con ellos.
La banda sonora intenta seguir el estilo creado en 1993 por John Williams, así que no aporta mucha novedad, pero casi que mejor, cuando algo funciona...no lo toques.
Un guión que a veces tira a lo cómico, dado que tenían que aprovechar la gran capacidad para la comedia que tiene Chris Pratt. Aunque el argumento es demasiado parecido al de la primera entrega, tiene un ritmo increíblemente vibrante.
Jurasic World a pesar de todo logra superar a "El mundo perdido" y a la tercera parte, nos deja con un gran final y los pequeños soñaran con el Indominus Rex.
Lo mejor: Efectos especiales y banda sonora.
Lo peor: Que se hable más de los tacones de la protagonista que del Indominus Rex.
Han pasado 20 años e Isla Nublar vuelve a abrir sus puertas al público. Había una gran expectación por parte de los espectadores por ver cómo sería esta nueva entrega, solo teníamos una cosa asegurada, los efectos especiales no nos iban a defraudar y eso, fue lo que ocurrió; lamentablemente, no fue igual en el resto de elemento.
Para comenzar, hablaremos de los personajes, Owen, interpretado por Chris Pratt, y Claire, interpretada por Bryce Dallas Howard. No pegan como pareja, además que la actuación de Chris es un poco justa. El hecho de que Claire se ponga a correr con tacones nos lleva más a la comedia que a la acción.
Sin ninguna novedad en la historia: familia con problemas, niños que se pierden, y el héroe que va a rescatarlos a pesar de que haya dinosaurios a su alrededor. Como no podía ser de otra manera, aparece una tercera persona, Hoskins, interpretado por Vincent D'Onofrio, que quiere usar a los dinosaurios para su propio beneficio.
Es evidente que la tecnología ha avanzado de manera notable durante dos décadas y eso se ve reflejado en el film. Los efectos especiales son, sin duda alguna, lo mejor de un largometraje que, tras sus dos horas de duración, no aporta ninguna novedad a lo que su historia se refiere.
Su director Colin Trevorrow, junto a los guionistas, no estuvieron muy acertados en algunas ocasiones del film. Por un lado, (SPOILER) a pesar del bonito homenaje, no solo con la música sino por el hecho de que usan los coches de la primera película de la saga, no entendemos que todavía funcionen o que tengan gasolina suficiente para poder continuar. Aunque este es solo uno de otros de los fallos que todavía, los espectadores, no entendemos.
Respecto a la historia, con ver los primeros 15 minutos, ya sabemos quién va a ser el héroe, así como el enemigo que morirá a manos de un dinosaurio, sin embargo, lo que no imaginábamos era que iba a tener escenas tan típicas como el beso tras haber sido salvado o tan peliculeras como (SPOILER) que para matar al dinosaurio deban aliarse dos clases diferentes y acudir, finalmente, a un tercero, todavía más grande que consigue matarlo.
En conclusión, todas las ganas y emoción que tenía de ver el film, se fueron diluyendo conforme esta iba transcurriendo, llegando al punto de mirar la hora y considerarla como una película más de ficción que destacará, simplemente, por su gran acogida en taquilla.
Lo mejor: Los efectos especiales.
Lo peor: Una historia que se repite con escenas demasiado típicas.